9 de noviembre de 2010

Crítica de JACUZZI AL PASADO


Una comedia sin nada que destacar, con el único exponente del siempre solvente actor John Cusack y una amalgama de constantes chistes de humor soez referidos al sexo y otro tipo de bromas macabras que se hacen cíclicas a lo largo del metraje.



La película relata la juerga de unos amigos que deciden rememorar sus mejores tiempos de adolescentes en un hotel rural que en la actualidad ha perdido todo su encanto. Con un Jacuzzi como particular máquina del tiempo, deciden tomar conceptos ya explotados anteriormente en el cine con todas aquellas películas que beben de las fuentes de “La Máquina del Tiempo” o “Regreso al futuro”.


Una vez en los años 80, las bromas estúpidas y otras tantas idioteces que a veces acaban provocando la risa fácil del espectador, se acaban mezclando con esta especie de “Cuento de Navidad” o “Los fantasmas atacan al jefe” versión campamento adolescente. El hecho de que estos amigos viajen en el tiempo, para reencontrarse con yo pasado y traten de redimir sus vidas parece ser el hilo argumental de una película que trata, sin mucho éxito, de contarnos algo que vaya más allá de la irreverente estupidez humorística que nos ofrece.

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